En Bucarest existen, al menos, dos factores que hacen que este tipo de inversión sea atractiva: existe un déficit de espacios para alquiler y además que sean de buena calidad, especialmente en las zonas centro y norte de la ciudad. En segundo lugar la demanda de espacios para alquilar continúa creciendo al igual que los precios del alquiler.
El rendimiento obtenido mediante el alquiler de un apartamento en Bucarest es uno de los mayores de Europa, situándose en un 6% anual. En el caso de un promotor que construye un proyecto residencial con la finalidad de alquilarlo el rendimiento es aún mayor. Ya que, al construir, la inversión sería de entre un 50 -65% aproximadamente del precio de adquisición del inmueble. De forma que el rendimiento anual podría situarse en este caso en un 15%.
Bucarest necesita que este tipo de proyectos se desarrollen, en el contexto de que el stock inmobiliario disponible para el alquiler está compuesto, generalmente, por ofertas de baja calidad, con interiores improvisados y son propiedad de personas con una o con un número limitado de propiedades.
En Bucarest hemos asistido, en estos últimos años, a la aparición de pequeños o medianos inversores que compran propiedades, contentándose con un rendimiento mayor que el ofrecido por los depósitos bancarios y esperando la apreciación de los inmuebles con el paso del tiempo. Este tipo de propietarios son más conscientes y responsables frente a los inquilinos en lo que concierne a la calidad precio de la vivienda ofrecida, apuestan por el largo plazo en detrimento de un abordaje oportunista.
Hay que tener en cuenta el desarrollo de la Capital como centro de servicios, para cada vez más compañías multinacionales, que vienen a su vez alimentando la demanda de alquileres, con inquilinos más exigentes, tanto a largo como a corto plazo. Aun así el mercado inmobiliario de Bucarest no ha podido ofrecer todavía suficientes opciones para esta categoría de inquilinos, principalmente en la zona norte y en el centro de la ciudad.
También hemos visto como consecuencia de lo anterior, la aparición de inmuebles tipo Aparta-hotel, o apartamentos destinados al alquiler a corto plazo. Estos representan una opción validad para el nuevo tipo de inquilinos que prefieren la calidad de estos inmuebles a los situados en inmuebles residenciales.
Para llenar este segmento del mercado, nuevo en Rumania, y cubrir la demanda creciente, las compañías internacionales y los promotores autóctonos han comenzado a incluir en sus objetivos la construcción de proyectos destinados al alquiler. La opción es buena incluso pensando en una futura salida del mercado siendo viable también la venta individual de apartamentos, con este fin.
Fuente: www.realestatemagazine.ro